BAYER, LA RECETA DEL
EXITO
Por Luis M. Rivas. BerlinSur,
8 de mayo 2005
29.760 millones de euros
de facturación logró el grupo
químico alemán en 2004. 652
millones de beneficios netos en el primer
trimestre de 2005 (un 55,6% más en
el mismo periodo del año anterior).
Cifras para las que faltan superlativos
y que da de sobra para repartir buenos dividendos
entre los accionistas, conceder primas a
los directivos y para convencerse de la
eficacia de los planes de saneamiento. Y
para celebrarlo, Bayer adelantó a
finales de abril otro plan de reestructuración
que dejará en la calle a un millar
de empleados sólo en Alemania.
Tener el monedero bien repleto
no impide a Bayer, sin embargo, hacer todo
lo posible para evitar soltar algún
céntimo en impuestos. Una inspección
del fisco descubrió un par de trucos
contables con los que el grupo químico-farmaceútico
eludía el pago de impuestos de sociedades.
Bayer ha pagado la multa y asunto resuelto.
Pero no sólo a costa de los puestos
de trabajo y de las finanzas públicas
multiplica Bayer su capital; también
la naturaleza tiene motivos para desconfiar
del gigante alemán (no hay que olvidar
que la eliminación de empleos desemboca
en menores controles, más presión
sobre los operarios, etc.) Sólo en
la filial estadounidense Addyston se registraron
dos incidentes graves en ocho semanas (emisiones
del gas cancerígeno Acrylnitril).
Contra los peligros de la
industria química y la aparente impunidad
mundial de Bayer lucha desde 1978 la iniciativa
CBG (Coordinación contra los Riesgos
de Bayer). La asociación tiene por
objetivo llamar la atención sobre
la falta de controles y mecanismos mundiales
para impedir actividades y productos nocivos
de consorcios multinacionales como Bayer.
CBG basa su actividad en información,
acción y la solidaridad internacional.
El grupo continúa una tradición
de resistencia ciudadana iniciada en la
movilización de 1870 en Wuppertal
y continuada por numerosas personas y grupos
que durante décadas han intentado
pararle los pies a Bayer y exigido respeto
al medio ambiente y condiciones de trabajo
(y vida) dignas. El punto fuerte de CBG
es su cooperación solidaria con organizaciones
de más de 30 países. Desde
1982, además, las juntas de accionistas
se han visto ”animadas” por
pequeños inversionistas vinculados
a CBG. En la última del 30 de abril,
la Coordinación contra los Riesgos
de Bayer presentó numerosas enmiendas
e informes a los textos del consejo de administración
en los que se documentan y analizan puntos
vergonzosos del consorcio. A continuación
publicamos un extracto de esa documentación:
-Bayer llevó a cabo
acuerdos de precios ilegales con empresas
rivales siendo condenada en cuatro ocasiones.
En verano Bayer pagó 66 millones
de dólares de multa tras reconocer
ante los tribunales estadounidenses haber
apalabrado precios con otros productores
de complementos para plástico. En
otoño, el consorcio fue de nuevo
castigado, en este caso con 33 millones
de dólares, por haber formado un
cartel con otros fabricantes de poliester.
(...)Los carteles ilegales están
a la orden del día en Bayer desde
hace años. La directiva encubre esta
práctica.
-En 2003 un estudio de la
CBG titulado “Trabajo infantil en
la producción de algodón en
India” documentaba cómo los
consorcios internacionales de semillas se
benefician del trabajo infantil. En el estudio
se especificaba que la filial de Bayer en
India ProAgro empleaba a dos mil niños
de entre seis y 14 años. Tras conocerse
el informe, un portavoz de Bayer aseguro
que se tomarían las medidas oportunas
para acabar con esa situación. Sin
embargo, investigaciones recientes demuestran
que la situación apenas ha cambiado
en ProAgro. El pasado año 1650 niños
trabajaban aún en empresas subsidiarias
de la filial de Bayer. Eso contraviene las
normas de la OIT, OCDE y la ONU (...)
-En las inmediaciones de la
planta de Lanxess (empresa desgajada del
grupo Bayer) en Durban/Sudáfrica
fueron detectados compuestos de cromo altamente
tóxicos en las aguas subterráneas.
A los vecinos de la zona se les aconsejó
encarecidamente no emplear el agua de los
pozos de la zona ni para beber ni cocinar.
Lanxess no elude su responsabilidad, pero
asegura haber dejado de producir cromo en
1991. La contaminación detectada
ahora sería, según la empresa,
algo heredado. Bayer compró en 1968
la empresa Chrome Chemicals de Durban. Debido
a las deficientes condiciones de seguridad
la tercera parte de la plantilla sufre enfermedades
y dolencias crónicas. Al menos ocho
trabajadores murieron de cáncer de
pulmón y otros dos de tuberculosis
(...) Los afectados no han recibido hasta
el momento ningún tipo de indemnización.
La contaminación del agua subterránea
demuestra, por otra parte, que Byer no ha
sido capaz en 14 años en emprender
tareas de saneamiento del terreno.
-Un tribunal estadounidense
obligó el pasado año a Bayer
a indemnizar con 400.000 dólares
a Miguel Valverde, un hombre de 33 años
que había sufrido un ataque de apoplejía
después de tomar durante tres días
Alka-Seltzer Plus, un compuesto antigripal.
El jurado consideró que Bayer había
puesto en circulación un producto
deficiente y peligroso ignorando además
la existencia de remedios alternativos inocuos.
Alka-Seltzer Plus contenía hasta
el año 2000 fenilpropanolamina, un
componente activo que incrementaba el riesgo
de ataques en un 150 a 300%. Bayer conocía
los riesgos vinculados a la fenilpropanolamina
desde hacía décadas. Sin embargo,
la industria farmaceutica mantuvo ocultos
sus estudios para no poner en peligro las
ventas de medicamentos con fenilpropanolamina;
una actividad que le reportaba cientos de
milllones de dólares al año.
Pero aún, bajo la batuta de Bayer,
los fabricantes elaboraron contrainformes
y amenazaron con medidas legales para retrasar
lo más posible la prohibición
de fenilpropanolamina por parte de las autoridades
sanitarias estadounidenses. Una estrategia
que le costó la vida a cientos de
personas. La Coordinación contra
los Riesgos de Bayer exige el enjuiciamiento
de los resposnables de Bayer y de las demás
empresas (...)
-Practicamente a diario se
producen en las plantas de Bayer incidentes
peligrosos, cuyas causas, entre otras, están
en los recortes de plantilla. Una breve
selección de incidentes del segundo
semestre de 2004: en la planta de Addyston
(EE.UU.) se registraron nueve escapes de
sustancias tóxicas. La fábrica
pertenece desde 2005 a Lanxess, nueva filial
de Bayer para suministrar plásticos
y caucho. El 23 de noviembre se produjo
una explosión en la factoria de Bayer
en Brunsbüttel, Alemania. Cinco trabajadores
hubieron de ser hospitalizados. El 29 de
septiembre, ocho operarios de la planta
de Bayer en Uerdingen, Alemania, resultaron
heridos al producirse un accidente en la
producción de carbón activo.
También en Uerdingen, el 11 de diciembre,
hubo un escape de 400 kilos de ácido
adípico.
El 3 de noviembre un corte en el fluido
electrico provocó un escape a la
atmósfera de vapores nitrosos y de
cloro. Un joven de 15 años sufrió
una grave intoxicación.
-En la zona algodonera del
sur de India los pesticidas de Bayer siguen
provocando envenenamientos mortales. Bayer
domina el mercado indio de plaguicidas y
produce a través de subcontratas,
insecticidas descartados en Europa como
monocrotophos. Debido a la falta de medidas
de seguridad, los accidentes están
a loa orden del día y los acuiferos
de zonas enteras están contaminados
(...)
El año pasado salieron
la luz documentos internos de Bayer que
prueban que la compañía expuso
conscientemente en 1984 a miles de hemofílicos
de Asia y Argentina a contraer el sida por
utilizar KOATE, un concentrado antihemofílico
contaminado con el virus causante de dicha
enfermedad y que ya había sido retirado
del mercado en Estados Unidos. (Los documentos
internos de la compañía fueron
publicados en al prensa a raíz de
juicios de damnificados. Entre los países
afectados aparecen Hong Kong, Taiwan, Malasia,
Singapur, Indonesia, Japón y Argentina)
Para más información: www.cbgnetwork.org
Fuente: Junge Welt 29.IV.2005