“A los inversores les gusta”

El economista alemán Heiner Flassbeck habla sobre la unidimensionalidad del “mainstream” neoliberal en la prensa económica.

Sr. Flassbeck, ¿comparte la opinión de Albrecht Müller, que dijo que el (semanario alemán) Der Spiegel se ha convertido en el órgano principal del “mainstream” neoliberal?

H.F: Hay algo de eso. Der Spiegel propaga desde hace 15 años la política económica “moderna”. Reproduce lo que dicen el sector político y el económico. Der Spiegel es entre tanto el principal medio del neoliberalismo y, lamentablemente, un síntoma de cómo se ha desbaratado la visión crítica sobre el acontecer político-económico.

¿Còmo explica eso?
HF: En Alemania, los periodistas salen de Universidades, donde, en las disciplinas económicas, sólo aprenden la unidimensionalidad del “mainstream” neoliberal. Es el único país del mundo donde pasa esto. No hay pues que asombrarse cuando eso se refleja en los medios. Los periodistas echan mano de lo más cercano a sus propios, simplistas y unívocos prejuicios económicos. Y a los inversores les gusta lo que leen en los diarios y revistas.

¿Còmo califica Ud. la sección económica de la prensa escrita?
HF: El Financial Times Alemania y El Frankfurter Rundschau son las grandes excepciones. Son abiertos y amigos de la discusión. Y no lo digo porque escribo en esos diarios, porque me publican en otros medios, como el Frankfurter Allgemeine (FAZ). Pero la enorme mayoría y especialmente los dos principales diarios, el Süddeutsche Zeitung y el FAZ, representan desde la perspectiva económica claramente la posición del Der Spiegel.

¿Radica eso en que los periodistas quieren ubicarse entre los vencedores? Al fin y al cabo, el neoliberalismo ha vencido, al menos provisionalmente.

HF: Pero al final no vencerá. Porque no puede vencer. Las posiciones ilógicas e incompletas no pueden nunca conducir a una política exitosa. Si los periodistas creen eso, se confunden. Pero la mayoría lo escribe así y reproduce lo que quiere el sector político y económico. Los medios por sí mismos no toman una posición, sino que refuerzan lo que ya está dado. En un país en el que el 99 por ciento de los economistas tiene la misma opinión, es imposible que la prensa tenga una opinión propia. Los medios no están en condiciones de crear posiciones independientes. Aunque tendrían que tomar y representar más decididamente diferentes posiciones tanto sobre el país como sobre el extranjero!

¿Si los medios estandarizados están conectados con Universidades estandarizadas que representan el mismo dogma, queda algún marxista o keynesiano, aparte del Grupo Bremer Memorandum?
HF: Casi ni uno solo! Es difícil explicarlo aisladamente. Por una parte, eso tiene que ver con el estricto sistema de “captación” alemán (Nota del Editor: elección o designación de nuevos miembros a través de los antiguos). A partir de mediados de los 60, apenas si se dejó entrar en las Universidades a alguien de fuera, salvo a aquellos que habían estudiado en Universidades alemanas y se convirtieron en asistentes de sus profesores. En los 50, y hasta principios de los 60, se empleó a muchos docentes extranjeros, incluso a los que no tenían una carrera académica clásica, y la discusión era por consiguiente mucho más abierta.

Ud. es un economista que no coincide con el “mainstream” pero es publicado por muchos diarios. Eso lo convierte en un bufón del sistema o es algo que busca concientemente?
HF: En las redacciones también se aburren de la monotonía. Necesitan otras voces. Lo necesitan también los lectores, cuando leen siempre lo mismo en todos los diarios. Por eso dejan escribir a unos cuantos lo que piensan, pero somos tan pocos que no podemos obrar grandes cambios. De paso, en muchos países soy considerado un economista del “mainstream”, sólo en Alemania se considera un “radical de izquierdas”. Es asombroso ver cómo este país ha unificado su opinión.

“ Lamento que Ud. tuviera que discutir sobre política económica con una persona tan incompetente”, escribió un lector en su página Web. Se refería a la jefa del grupo parlamentario de Los Verdes, Katrin Göring-Eckardt, en el programa de Sandra Maischberger, en el canal N-TV. Fue realmente tan horrible?

HF: Realmente no me interesa tener nada que ver con la Sra. Göring-Eckardt, y no sé tampoco qué profesión tiene. Pero yo nunca me expondría a hablar sobre algo de lo que no tengo ni idea. Nuestros políticos sí que lo hacen! Yo nunca hablaría sobre medicina. Pero en Alemania cualquier jurista le dice a uno cuál es el rumbo económico que hay que seguir.

Entrevista: Günter Frech
Traducción: Verónica Marchiaro. BerlinSur.