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                                  Por Ismael Llinás 
                                  Cogollo 
                                
                                Latintrónica, así 
                                  se llama el boom de música electrónica 
                                  creada por artistas latinoamericanos. México, 
                                  Argentina, Brasil, Colombia, Venezuela, son 
                                  los escenarios de este reportaje a modo de decálogo. 
                                Hace diez años y más, la prensa 
                                  especializada en música juvenil, popular 
                                  y contemporánea (rock, pop, tecno y sus 
                                  derivados) hablaba del rock mestizo y planteaba 
                                  que había llegado para establecer un 
                                  precedente en el arte y la cultura. Casi dos 
                                  décadas después, cuando ya se 
                                  puede hablar con más frialdad del fenómeno 
                                  que dio grupos como Fabulosos Cadillacs, Café 
                                  Tacuba, Desorden Público, Mano Negra 
                                  y King Changó, uno de los puntos importantes 
                                  y relevantes es que se consolidó un movimiento 
                                  que, entre otras cosas, mueve un negocio multimillonario: 
                                  el comercio mundial de la música latina, 
                                  sobre todo en lo quje se refiere al rock. 
                                Paralelo a esto, en un ámbito más 
                                  subterráneo y como fruto de este desarrollo 
                                  en la música, donde se ha aprendido a 
                                  manejar la industria y tanto calidad musical 
                                  como en producción han crecido juntas, 
                                  el arte musical en América da la bienvenida 
                                  a otro de sus híbridos culturales: el 
                                  latintronic.  
                                La derivación del nombre es lógica, 
                                  de todas maneras valen las explicaciones: latin, 
                                  referente a latino, para este artículo 
                                  se entiende por los seres que nacieron en lo 
                                  que se conoce geopolíticamente como Latinoamérica 
                                  (México - Argentina, incluyendo a los 
                                  que están entre ellos, y unos cuantos 
                                  barrios dispersos en New York, París, 
                                  Barcelona, etc); trónica, de la raíz 
                                  electrónica, término que se utiliza 
                                  para denominar a la música que utiliza 
                                  medios electrónicos para producir sonidos 
                                  y más específicamente sonidos 
                                  digitalizados.  
                                Latintrónica: música digital 
                                  que se produce en el ambiente porteño 
                                  de Buenos Aires; también en la frontera 
                                  más movida del mundo, Tijuana; o, en 
                                  la falda de las montañas orientales de 
                                  Bogotá; en toda Brasil, gigante de la 
                                  música continental; a un costado de las 
                                  murallas de Cartagena, frente al mar Caribe; 
                                  en el barrio latino de París, de Nueva 
                                  York, de Londres... 
                                Todo esto ha sido consecuencia del acelerado 
                                  desarrollo de las nuevas tecnologías 
                                  en sonidos y también por la gran acogida 
                                  que tuvo en la generación de los noventa 
                                  la cultura del tecno, del trance, de la electrónica. 
                                  Todavía está en la memoria de 
                                  muchos aquellas fiestas clandestinas, guiadas 
                                  por beats acelerados y, en algunos casos, por 
                                  la 'magia' del éxtasis: los famosos after 
                                  party o 'afterpary', como se le llegó 
                                  a asimilar en el lenguaje de la calle. 
                                Pasada la moda se mantuvo el movimiento cultural, 
                                  tanto así que todos los países 
                                  de América Latina han tenido las visitas 
                                  de los mejores djs del mundo en donde casi siempre 
                                  se logra llenar las expectativas de asistencia 
                                  de un público que ya hace parte de la 
                                  variopinta gama de tribus que existen en el 
                                  continente.  
                                Sin embargo, la muestra más fiel de 
                                  la cultura electrónica en América 
                                  Latina son los colectivos musicales insertados 
                                  en el panorama y en la historia de la electrónica, 
                                  como bien habla el último capítulo 
                                  del libro "Loops, una historia de la música 
                                  electrónica", donde se reconoce 
                                  que las nuevas tendencias en estos sonidos están 
                                  llegando las culturas del tercer mundo.  
                                Para el caso concreto de las culturas latinoamericanas 
                                  propongo 10 puntos para destacar del movimiento; 
                                  vistos, claro está, desde la lupa arbitraria 
                                  y fortuita de un investigador cultural en el 
                                  2003. Para esto he realizado y revisado entrevistas 
                                  con protagonistas; páginas oficiales 
                                  de los músicos; leído artículos 
                                  de actualidad sobre el fenómeno; hurgado 
                                  en Home Page, libros, revistas dedicadas a divulgar 
                                  y analizar la música y la cultura; y 
                                  escuchado durante un año temas de estos 
                                  grupos, esto último bajo la posibilidad 
                                  que genera la investigación musical por 
                                  medio de herramientas tan amadas como odiadas 
                                  como el Kazaa y otro tipo de formas de intercambio 
                                  de archivos. 
                                1.- Todo empieza cuando el nombre Nortec empezó 
                                  a hacer parte del acervo de quienes escuchan 
                                  música electrónica. Nortec Collective 
                                  nació oficialmente en 1999 cuando Pepe 
                                  Mogt del grupo Fussible experimentó con 
                                  samples y discos norteños evolucionando 
                                  en un sonido que se ganó su espacio en 
                                  el tecno mundial. Sus bases musicales son el 
                                  Nortec y todas las influencias de la música 
                                  electrónica, trabajando sobre el techno 
                                  alemán e inglés que todos han 
                                  conocido -Tangerine Dream, Yello, Cabaret Voltaire, 
                                  Aphex Twin, y Kraftwerk- con la música 
                                  vernácula Mejicana que escuchaban en 
                                  la sala de estar de sus padres. 
                                A partir de entonces el mundo conoció 
                                  el disco “Tijuana Sessions Vol 1”, 
                                  y supo que el Nortec Collective traía 
                                  un sonido revolucionario para la escena de la 
                                  electrónica y de la música tradicional 
                                  del nuevo milenio. La publicación del 
                                  nuevo disco “Tijuana Sessions Vol 2”, 
                                  se espera con interés, sobre todo por 
                                  el anuncio de ser para escuchar y no tanto para 
                                  bailar, como dice Botisch, uno de los protagonistas 
                                  de todo esto.  
                                2. En Guadalajara hay una mayor exploración 
                                  del llamado acid cabaret y la electrónica 
                                  latina. Por eso los creativos de Nopal Beat 
                                  (así se hacen llamar) como Sussie 4, 
                                  Shock Bukara, Sweet electra, Double Helix, Galápago, 
                                  Fatnaked Lady, Axkan, God is my name, Medina, 
                                  Tovar, Club Nova, trabajan la música 
                                  tradicional de los bares y de las bailotecas 
                                  en México, para incorporarlas a sonidos 
                                  houses, acid jazz, trance con groovy y dance. 
                                  En líneas generales, Nopal Beat es un 
                                  sello discográfico fundado en Guadalajara, 
                                  México, a fines de la segunda mitad de 
                                  la década de los noventa por Luis Flores 
                                  -uno de los músicos pioneros de la escena, 
                                  en actividad desde 1993- y Carlos Rodríguez 
                                  (dj Chass).  
                                Se lanzaron a la escena con un primer disco 
                                  recopilatorio, Acid Cabaret Vol. 1, editado 
                                  por la discográfica independiente Opción 
                                  Sónica en 2000. Más tarde la etiqueta 
                                  francesa Cyber Productions distribuyó 
                                  en Europa algunas producciones en vinilo, hecho 
                                  trascendental para la internacionalización 
                                  del colectivo. En 2002, tras cinco años 
                                  de labor subterránea, firmaron contrato 
                                  con la multinacional EMI para convertirse oficialmente 
                                  en su subsello de música electrónica, 
                                  e iniciar una nueva era. Con nuevos discos en 
                                  la fila para ser prensados. 
                                3.Un hecho desapercibido para buena parte de 
                                  la prensa en los Grammy Latinos 2003, fue el 
                                  galardón ganado por el grupo argentino 
                                  Bajofondo Tango Club en la categoría 
                                  de música alternativa. Sin duda una de 
                                  las genialidades que ha salido en el mercado 
                                  discográfico del continente de este año, 
                                  liderado por Gustavo Santaolalla uno de los 
                                  protagonistas de la música contemporánea 
                                  en el continente, capaz de estar detrás 
                                  de los telones de grupos de la talla de Café 
                                  Tacuba, Maldita Vecindad, Caifanes, Julieta 
                                  Venegas, Los Prisioneros, León Gieco, 
                                  Divididos, Juana Molina y Puya.  
                                Gustavo Santaolalla, creador del sello Surco 
                                  (dedicado al rock), abrió paso a un sello 
                                  música electrónica llamado Vibra, 
                                  donde publicó “Bajofondo Tango 
                                  Club” un disco donde lo electrónico 
                                  se fusiona con diferentes elementos y estilos 
                                  de la música latina para dar un resultado 
                                  original y novedoso. Un disco que combina los 
                                  estilos tradicionales de la música electrónica 
                                  como el house, trance, dub, drum n’ bass, 
                                  etc., con los sonidos clásicos del tango. 
                                  En "Bajofondo Tango Club" participaron 
                                  varios artistas como el propio Gustavo Santaolalla, 
                                  Juan Campodónico, Adriana Varela, Adrián 
                                  Iaies, Pablo Mainetti, Emilio Kauderer, L.S. 
                                  Piano. 
                                Por otro el lado de la misma vía, Argentina 
                                  tiene una ola electrónica que contiene 
                                  a Gustavo Cerati (veterano en el arte de los 
                                  loops) y a otros nombres con tendencias minimalistas 
                                  como Gustavo Lamas, Vlisa, Tammy, o más 
                                  house como el de Oscar Lalanne y con sonidos 
                                  roqueros al estilo de Diego Ro-K. 
                                4.Brasil en su música es tan poderoso 
                                  como en el fútbol y pueden llegar a ser 
                                  más mágicos y creativos; en este 
                                  escenario inventa recursos creativos, sofisticados, 
                                  vanguardistas y, por ello, tiene fama de ser 
                                  la cultura que mejor asimila el asunto del mestizaje 
                                  cultural. El listado de los grandes es largo 
                                  si se incluye a Caetano Veloso, Giberto Gil, 
                                  Carlos Jobim y todos los grandes, con canciones 
                                  y estilos de ensueño y sensualidad.  
                                Por ahora dedicaremos estas líneas a 
                                  uno de sus nuevos creadores, Amon Tobin, quizá 
                                  el más grande artista de música 
                                  electrónica de todo este movimiento. 
                                  Su obra es una genialidad por donde se la escuche. 
                                  Su especialidad no es poner a bailar sino crear 
                                  ambientes y atmósferas por medio de sus 
                                  experimentos con la música electrónica 
                                  que van desde la samba - estática, hasta 
                                  sus permanentes coqueteos con las bandas sonoras 
                                  de películas, especialmente las que tienen 
                                  que ver con las realizadas por Ennio Morricone 
                                  o las de películas de David Lynch; también 
                                  escucha mucho jazz y grupos como Caníbal 
                                  Corpse y David Byrne. De él se recomiendan 
                                  todos los discos, por ejemplo, “Adventures 
                                  in foam”, “Permutation”, “Supermodified”, 
                                  los cuales necesitan una buena disposición 
                                  para ser escuchados, pero una vez entendidos 
                                  se uno se da cuenta por qué tanto bombo. 
                                 
                                5. Tres discos sirven de trampolín para 
                                  tocar el tema de la música brasileña: 
                                  "Caipirissima: Batucada eletronica", 
                                  "Brazilified" y "Chill Brazil 
                                  2003", los cuales, además, hablan 
                                  de las tendencias que reinan en este escenario. 
                                "Caipirissima: Batucada eletronica", 
                                  representa la variedad temática de la 
                                  electrónica en este país. Desde 
                                  el tecno suave de Joao Parahyba con el tema 
                                  "Central do brasil", hasta el buen 
                                  drum 'n bass en "Monica No Samba" 
                                  de Dj Dolores. También los eclécticos 
                                  experimentos sonoros de Amon Tobin junto al 
                                  también genial Suba quien presenta el 
                                  disco "Pupila Dilatada", un sube y 
                                  baja entre el tecno, la samba y el trance. Más 
                                  tirados a trabajar sonidos con percusiones muy 
                                  a lo jungle está Apollo 9 y Anvil FX. 
                                  Para ir finalizando el recuento de este disco, 
                                  citemos a Cyz y J. Andrade, una pareja musical 
                                  que se manifiesta en este compilado con "Zumbí", 
                                  sigue Ramilson Maia con una electrónica 
                                  basada en ritmos tradicionales. Al final, Chelpa 
                                  Ferro cierra nostálgicamente, un poco 
                                  a lo bossa nova con "Miniatura Chelpa". 
                                 
                                El segundo, "Brazilified" es un disco 
                                  donde las melodías y ritmos una atmósfera 
                                  especial. Es todo un viaje imaginario por Brasil 
                                  a través de las canciones de Butti49, 
                                  Soul Quality Quartet y de Jazzanova, A Swell 
                                  Session con melodías especiales de grupos 
                                  como Friend of Rio y Easydelics. También 
                                  los temas bailables venidos de la imaginación 
                                  de Move your body, Mr. Ido y Da Lata. El disco 
                                  también contiene experimentos con música 
                                  tradicional, especialmente con instrumentos 
                                  de percusión con los grupos Tr? by Trío 
                                  y Arsenal berimbau, el disco finaliza con un 
                                  house sambero de Nova Fronteira.  
                                El tercero, "Chill Brazil 2003", 
                                  trabaja más sobre la base del Chill Out 
                                  y la bosanova. Es un disco recopilado por la 
                                  ilustre y legendaria artista y compositora brasileña 
                                  Joyce. En "Chill Brazil 2003" combina 
                                  Bossas clásicas con sensuales toques 
                                  Soul con las voces más frescas de la 
                                  música electrónica contemporánea 
                                  de Brasil. Ritmo suave y poesía, sensualidad 
                                  y belleza en las voces de Bebel Gilberto, Tom 
                                  Jobim, Gilberlto Gil, Milton Nascimiento, Tania 
                                  Maia, Marcos Valle, Oscar Milito, Joyce...  
                                Escribir sobre música brasileña 
                                  es tan complejo como hacerlo de la flora de 
                                  la amazonía; sin embargo, antes de cerrar 
                                  es capítulo Brasil es preciso tocar unos 
                                  nombres clave. Primero el de Max de Castro, 
                                  guitarrista, productor, compositor y cantor, 
                                  es uno de los grandes exponentes de la música 
                                  electrónica cantada; sus dos discos "Samba 
                                  raro" y "Orquesta Klaxon", son 
                                  indispensables para entender este sonido brasileño. 
                                  También se debe escuchar Ramilson Maia, 
                                  Dolores & Santa Massa, Zuco 103, Bebel Gilberto, 
                                  Chico Science & Naçao Zumbi, Zémaria, 
                                  entre los cientos de grupos que componen los 
                                  catálogos de sellos disqueros como Trama, 
                                  Quango, filial de Palm Pictures, Muquifo Records, 
                                  Net Records y YB D.u.b. 
                                6. Una de las maneras como entró la 
                                  música electrónica a las ciudades 
                                  latinoamericanas fue como lo hizo en Venezuela 
                                  en los años ochenta. La fiebre de la 
                                  miniteca (discotecas móviles) hicieron 
                                  que todavía quede en la memoria nombres 
                                  como Sandy Lane, Infierno, ZC, New York People, 
                                  entre una gran variedad de nombres y estilos 
                                  que tenían algo en común: la divulgación 
                                  de la música dance del momento, el show 
                                  de las mezclas y la cultura del dj. De todo 
                                  esto queda poco de la miniteca (ahora son grandes 
                                  productoras de eventos de electrónica) 
                                  pero queda mucho de la cultura del dj y de la 
                                  electrónica. De hecho existen diversas 
                                  vertientes. Un ejemplo son Los Amigos Invisibles 
                                  quienes acaban de lanzar su cuarto larga duración 
                                  "Venezuelan Zinga Son Vol.1", toda 
                                  una muestra de arte moderno, minimalista y a 
                                  la vez muy dance, retro y funk, abrigando la 
                                  bandera de los sonidos globales y el espíritu 
                                  de la rumba…  
                                7. Durante finales de los años noventa 
                                  e inicios del 2000, en el barrio La Macarena, 
                                  en las faldas de los andes orientales bogotanos, 
                                  el colectivo Mutaxión se hizo cargo de 
                                  buena parte de la creatividad de la música 
                                  electrónica; era todo un hervidero de 
                                  ideas y de experiencias, además de un 
                                  intercambio de culturas entre europeos, latinoamericanos, 
                                  norteamericanos, colombianos, bogotanos, costeños, 
                                  caleños, paisas, que no lograron consolidar 
                                  comercialmente gran cosa, pero dejaron un precedente 
                                  en el escenario de la música electrónica 
                                  de Bogotá, sobretodo por su nivel de 
                                  experimentación: cada presentación 
                                  de ellos era un laboratorio musical donde participaban 
                                  mucha gente. Todavía se hace memorable 
                                  su corta pero contundente vida subterránea, 
                                  en eventos donde participaban Danny Boom, Macky, 
                                  Richi, y otros que hacían parte de ese 
                                  colectivo. En la actualidad muchos de ellos 
                                  se encuentran desarrollando proyectos personales 
                                  que seguramente van a dar a luz en los próximos 
                                  años. De la misma manera, en otras partes 
                                  de la ciudad y el país se ha ido gestando 
                                  una ola de músicos por computador cuya 
                                  muestra es el disco Colombian Beat, un trabajo 
                                  que recopila una parte de la camada de músicos 
                                  electrónicos que están sumergidos 
                                  y escondidos en sus laboratorios sonoros.  
                                8. En Cartagena de Indias, una de las 'capitales' 
                                  del Caribe (junto a San Juan, La Habana, Caracas, 
                                  Puerto Príncipe, Kingston, con su particular 
                                  estilo de asumir lo cosmopolita) el sonido electrónico 
                                  tiene dos caras. Una cara la puede representar 
                                  el proyecto Kalamar Big Band, en donde participan 
                                  50 músicos de la costa atlántica 
                                  colombiana y, en ocasiones, mezclan ritmos electrónicos 
                                  con  
                                  sonidos autóctonos como cumbia, mapalé, 
                                  bullerengue, vallenato sabanero, entre otros 
                                  que sirven para este cóctel electrónico 
                                  en el cual les ayuda dj Kike un artista local 
                                  que ya tiene preparado algo que denomina Champetón, 
                                  una especie de champeta, house y progresivo 
                                  y jungle. 
                                La otra cara, los músicos de los picós 
                                  (discotecas andantes también) que hacen 
                                  de los ritmos africanos su propia versión 
                                  y, a base de creaciones e intervenciones electrónicas, 
                                  hacen una de las ramas más subterránea 
                                  de la champeta: la de las fiestas de los domingos 
                                  por la tarde. Es sobre todo la champeta del 
                                  barrio Olaya, diferente de la champeta de La 
                                  Boquilla y de Palenque porque tiene más 
                                  recursos electrónicos como sintetizadores, 
                                  reverberadores e incluso algunas ya están 
                                  trabajando con elementos digitales salidos del 
                                  uso de la computadora.  
                                Cada uno tiene su estilo y el sello que da 
                                  la creatividad de estar frente al mar. Mientras 
                                  lo de Kalamar Big Band es el resultado de los 
                                  20 años del tecno en el Caribe, lo de 
                                  la champeta es el resultado de un largo proceso 
                                  de asimilación cultural que desencadenó 
                                  en este nuevo ritmo.  
                                9. En París, en Nueva York, en Londres, 
                                  en el barrio de los latinos de estas ciudades 
                                  del 'primer mundo', se escucha en uno que otro 
                                  apartamento el retumbar electrónico de 
                                  una samba; o los loops del fragmento de un tango; 
                                  también las atmósferas creadas 
                                  por una ranchera intervenida digitalmente hasta 
                                  el punto de que el resultado es otra cosa; incluso, 
                                  han escuchado una cumbia trip hop y un merengue 
                                  trance. Son los resultados de los cientos de 
                                  músicos que han migrado a estas tierras 
                                  a realizarse como persona y profesionales. A 
                                  vivir allá. A hacer su obra en este tipo 
                                  de países llamados del ‘primer 
                                  mundo’ por sus condiciones económicas 
                                  más accesibles que las del ‘tercer 
                                  mundo’. De esta manera y, por lo general, 
                                  resultan asociaciones como el combo franco-argentino 
                                  Gotan Proyect, que revitalizan los nuevos sonidos 
                                  del tango.  
                                10. Existen antecedentes de música electrónica 
                                  latinoamericana. De hecho, durante los años 
                                  setenta se empezaron a incorporar estos sonidos 
                                  y fue en los ochentas cuando grupos como Los 
                                  Prisioneros, Soda Stereo, Estados Alterados 
                                  utilizaron recursos como el sintetizador y las 
                                  baterías programadas, con un sonido más 
                                  enfocado al tecno inglés. Sin embargo, 
                                  la democratización de las nuevas tecnologías 
                                  ha sido uno de los factores más determinantes 
                                  para lograr esta explosión de creatividad. 
                                  El paulatino acceso a las computadoras y a los 
                                  programas que permiten tener un estudio de sonido 
                                  a un costo muchísimo menor que el tradicional 
                                  permiten la experimentación y el desarrollo 
                                  de ideas.  
                                Otro punto para anotar antes de ir finalizando 
                                  este recorrido es que debido a que es un movimiento 
                                  que hasta ahora asoma la cabeza, todavía 
                                  no existe una divulgación fuerte de este 
                                  tipo de materiales (salvo algunos casos) y la 
                                  industria discográfica todavía 
                                  no ve un negocio lucrativo el invertir en estos 
                                  grupos. Es por esto que una de las maneras como 
                                  se desarrollan trabajos y se divulgan para el 
                                  público es por medio de las recopilaciones 
                                  (este artículo nombró varias). 
                                También está el caso de los extranjeros 
                                  que se dejan encantar por los sonidos de estos 
                                  lugares y se dedican fusionar, es el caso del 
                                  croata Suba en Brasil y de Richard Blair de 
                                  Sidetepper, el colectivo colombo-cubano-jamaiquino-inglés 
                                  con una de las propuestas más globales 
                                  y sólidas del asunto de la mixtura musical, 
                                  y de muchos que se han dedicado a dar y recibir 
                                  creatividad musical. Es precisamente por medio 
                                  de ellos como esta música ha llegado 
                                  a oídos de otros países como Inglaterra, 
                                  Francia, Alemania, Bélgica, Holanda, 
                                  de gran tradición tecno, donde se han 
                                  presentado grupos como Nortec Collective, Nopal 
                                  Beat, Max Castro, Amon Tobin, entre otros y 
                                  su música ha sido valorada por su nivel 
                                  de creatividad y por la sólida propuesta 
                                  profesional. 
                                Para finalizar, una de las ventajas que tiene 
                                  este movimiento es la cercanía con las 
                                  nuevas tecnologías de la comunicación 
                                  en el sentido de que el internet se ha vuelto 
                                  la herramienta para encontrar el reconocimiento 
                                  que en otro tipo de medios más conservadores 
                                  no se ha logrado. Hay que anotar la calidad 
                                  de propuestas de diseño gráfico 
                                  de las páginas oficiales de cada uno 
                                  de estos grupos, en especial las de Amon Tobin, 
                                  Nortec Collective y Nopal Beat.  
                                Siguiendo el tema de los medios de comunicación, 
                                  es bueno reconocer la labor del periodista mexicano 
                                  Enrique Blanc, un gran estudioso de los asuntos 
                                  de música contemporánea latinoamericana, 
                                  su artículo “Latintrónica”, 
                                  publicado en la revista La Banda Elástica 
                                  de septiembre de 2003 sirvió de inspiración 
                                  para este decálogo; también el 
                                  mapa de música brasileña que publicó 
                                  el periodista carioca Guto Barra en el disco 
                                  recopilatorio "Batucada electrónica" 
                                  del sello Caipirinha Music.   
                                 Nota publicada en www.colombia.com 
                                
                                .  
                                    
                                   
                                     
                                 
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